INICIO / La franquicia perderá más de un 20% de la facturación para este ejercicioLa franquicia perderá un 22% de la facturación prevista para este ejercicio Me gustaría haber podido tener diferentes encuentros y múltiples cafés con empresarios y con mis colaboradores en este tiempo, pero la realidad es que me he tenido que conformar con múltiples conversaciones telefónicas, skypes y facetimes derivadas de mi actividad donde he podido preguntarles por su visión después de esta pandemia. Un hecho es cierto y es que para casi todas las empresas que participan en este sector, franquiciadores y franquiciados, ha sido un duro golpe sin tiempo para poder prepararse ni anticiparlo. Los remedios son los conocidos: ajustes temporales de plantillas, negociación con propietarios de locales, interrupción temporal de todo aquello que no es imprescindible y acceso a fondos propios o solicitud de préstamos. Los principales datos económicos de la franquicia en pleno Covid-19 Conjuntamente con los analistas de nuestro equipo, he podido trabajar estos días en una aproximación de las cifras más importantes en que se encuentra inmersa la franquicia hoy con el objetivo de tener un criterio razonable de análisis. Estos son los principales datos una vez analizados: Redes de franquicia: Más del 80% de las redes, en concreto y según nuestras apreciaciones el 81%, o lo que es lo mismo, 1.041 redes de las 1.284 que vienen operando, han tenido que ver como sus establecimientos franquiciados tenían que cerrar temporalmente. Establecimientos franquiciados: Por otro lado, el 77% de los establecimientos franquiciados han tenido que cerrar sus puertas, lo que supone que tan solo un número cercano a las 16.000 unidades sobre 68.426 se mantienen operativas, principalmente en los sectores de alimentación, supermercados, panaderías, transporte, determinadas cadenas de restauración que operan en régimen de delivery y determinados servicios. Empleo: El empleo es donde mejores resultados presenta el sector. Un 34% de los 382.607 empleos que genera el sector franquicia se mantienen activos en sus trabajos. Esto equivale a más de 130.000 personas trabajando con un indudable peso en el sector de alimentación y supermercados. Facturación: El impacto en la facturación es más que significativo. El sector franquicia formado principalmente por pequeñas y medianas empresas perderá un 22% de la facturación proyectada para este ejercicio 2020. En conjunto son más de 5.000 millones de euros de facturación que dejarán de poder facturarse por el efecto de la pandemia. De los 23.500 millones de euros de facturación esperada, es previsible que las cifras finales se sitúen en torno a los 18.440 millones de euros de facturación conjunta en el sector y que se reparten de la siguiente forma: Restauración: -1.320 millones de euros Retail: -1.690 millones de euros Servicios: -2.050 millones de euros Ni en todos los sectores tendrá la misma incidencia, ni en todas las empresas tampoco incidirá de la misma forma. Qué es lo que pasará inmediatamente en el sector franquicia Habrá una recuperación paulatina del consumo y de la demanda que en su conjunto se anticipará en las empresas del sector. Mayores facilidades para encontrar nuevos locales y negociarlos en mejores condiciones. Aceleración de los nuevos procesos de expansión en empresas en fases de inicio. Auge del sector servicios en sus diferentes modalidades y ampliación de la oferta. En este caso, además, el sistema de franquicia ofrece indudables ventajas a múltiples nuevos emprendedores. Aparición de nuevos negocios franquiciadores adaptados a los nuevos escenarios como sucedió en la pasada crisis y que en algunos casos desplazarán a los actuales. Algunos de ellos ya están en gestión. Incremento del delivery y de las ventas on line donde muchos negocios no solo tendrán que adaptarse a este nuevo escenario, sino que tendrán que pensar de forma diferenciada en el mismo como una vía complementaria del negocio y de los ingresos. Cierre de franquiciados en todos los sectores de actividad y pérdida de ingresos por royalties y consumo en la casi totalidad de las redes, lo que obligará a una aceleración de la expansión e incorporación de nuevos franquiciados para compensar los déficits previsibles que surgirán. Mayor competitividad en atracción de clientes con sustanciales rebajas de precios, lo que exigirá una adaptación inmediata a los nuevos escenarios y una optimización de los recursos de marketing y comunicación. Importantes oportunidades para aquellas empresas con liquidez en poder adquirir o fusionar empresas debilitadas. Nuestra perspectiva Es evidente que este es un sector con fortaleza y que saldrá airoso de esta situación. No obstante, un hecho evidente es que habrá cierre de franquiciados que no tendrán liquidez suficiente para resistir una situación como la generada o no querrán solicitar financiación para poder asumirla. Habrá centrales de franquicia que si con antelación a esta pandemia no andaban sobrados, es evidente que no podrán tampoco resistir. Pero el contexto general, es que la gran mayoría de las empresas del sector seguirán adelante, se incorporarán nuevas empresas en el mismo franquiciando nuevos modelos de negocio y se incrementará la demanda de nuevas franquicias por parte de emprendedores e inversores que en estos momentos ya se observa en la aproximación y demanda de información por parte de los mismos. Corresponde a las centrales de franquicia un esfuerzo excepcional en liderar el nuevo escenario y en afrontar los cambios que si serán necesarios inmediatamente. Seguramente nada volverá a ser igual y no es función de los franquiciados acometer estos cambios. Es función de cada franquiciador proyectar mucho más allá su marca, su empresa, su franquicia y realizar hoy ya los esfuerzos necesarios si tiene la confianza y la convicción en los valores que representa y en los que debe invertir. Estos requerimientos afectan por igual a aquellas empresas más desarrolladas, como también y especialmente a todas aquellas empresas en fases de inicio, que si bien son mucho más sensibles, también tienen muchas más oportunidades y menos impedimentos para cambiar y adaptar sus estrategias. Mi percepción La mayor parte de conversaciones que he mantenido directa e indirectamente a través de nuestro equipo, son positivas y en las mismas se entiende que estamos en una situación dura, muy dura, pero al mismo tiempo pasajera. También en algún caso hemos percibido pesimismo, pero han sido las menos. Soy consciente que la recuperación va a ser lenta, pero de lo que se trata quizás no sea de ganar dinero en el corto plazo inmediato, si no de no perderlo, aguantar y mantenerse para después enfocarse en la ampliación de los resultados y lograr un fin de ejercicio equilibrado y ligeramente positivo que permita enfocar un futuro mejor. Evidenciamos que existe una preocupación inmediata por el momento actual y como es lógico por los aspectos económicos, incluso cuando no es necesario, pero a la vez echamos en falta algo más de planificación, dedicación de tiempo y recursos para el nuevo escenario que planteamos y que considero que va a llegar más pronto que tarde. Personalmente, creo que esta es la clave y que otras empresas en otros sectores ya están anticipando. Como en estos días he manifestado en diferentes ocasiones este es el momento de preparar las empresas y hacer todos aquellos deberes que sean necesarios para el momento en que la situación paulatinamente se desbloquee y vuelva a normalizarse. Ahora se dispone de tiempo para ello y es el momento de iniciar los preparativos invirtiendo lo necesario dentro de las posibilidades de cada empresa, para estar a punto en el momento en que se inicie la recuperación. Desde Tormo Franquicias Consulting estamos plenamente convencidos de que esta situación pasará y las empresas de este sector en un breve plazo de tiempo volverán paulatinamente a la normalidad. Eduardo Tormo Fundador y Director General de Tormo Franquicias Consulting y Crowdfranquicias Capital anteriorEl sector franquicia frente a la pandemiasiguienteEl sector franquicia después del Covid-19